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Sabemos que hasta que el cachorro no esté totalmente vacunado y desparasitado, no lo podemos sacar a la calle ya que podría coger alguna enfermedad y poner en riesgo al animal. Pero mientras ese momento llegue, podemos ir socializándolo poco a poco, ya que a mi entender, es una cosa muy impotante que deben aprender desde cachorros.

Una manera de socializarlo es sacarlo a la calle en brazos un ratito cada día, enrollado con una mantita si hace un poco de frío ya que cogen frío con un poco de aire que haga y si hace muchísima calor, mejor esperar a una hora donde las temperaturas sean menos elevadas. Pensemos que un cachorro tiene un corazón y unos pulmones muy pequeños, así que deberemos evitar que padezca por el agobiante calor. Sacándolo a la calle en brazos, será una forma de socializar al pequeño, es decir, acostumbrarlo a reaccionar de manera adecuada (sin miedo ni agresión) frente a  diferentes entornos, personas u otros perros. De esta manera, cuando sea la hora de su primer paseo, oirá ruidos de la calle como coches, gritos de niños, personas...etc, y habrá aprendido a ignorar las cosas de su alrededor sabiendo que no son negativas y no se asustará.

Al cachorro le encantará salir contigo en brazos a la calle y se distraerá al ver gente, ya que estará aburrido y ocioso de estar todo el día en casa metido. Y nada, luego cuando cumpla el calendario de vacunas, ¡ya podrá pasear todo lo que quiera! 

Otro forma de socializarlo, será relacionarlo con otros cachorros o perros adultos, asegurándonos antes de nada, que están perfectamente vacunados y desparasitados para que el pequeño no pueda contagiarse de nada.

También podemos acostumbrar a nuestro pequeño a ser cepillado, bañado e inspeccionado, para que luego no nos cueste asearlo y nos veamos envueltos en una guerra con él.

Algo que en casa se usa bastante es el aspirador, desde muy pequeño debes acostumbrarlo a este ruido poco a poco desde cierta distancia y graduar su nivel de intensidad si tiene esa opción.

Un perro bien socializado, será más fácil de educar y podrá ser aceptado más fácilmente por otros perros y personas, mientras que un perro que no sea haya socializado, será agresivo e incluso podrá llegar a morder por miedo.

Así que ya sabemos, si queremos que nuestro perro no sea miedoso y en cierta forma lo pase mal por los ruidos de su alrededor, toca socializarlo desde bien peque.

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